El regalo latente de Iker
Edu Bermúdez
Antes de que comiencen a leer esta cantidad de letras sin sentido alguno, me gustaría avisarles de un pequeño detalle. Conocí un día a alguien que siempre leía textos -de cualquier tipo- con una canción de fondo, cada vez una diferente. Y es que me enseñó que leer no es lo mismo con un background. Los seres humanos tenemos sentidos suficientes como para ser capaces de analizar un texto y estar escuchando una canción de fondo, así que, si no les importa, mi recomendación personal para esta pieza es “Sign of the Times” de Harry Styles. Ahora sí, disfruten.
Estaba estudiando y no lograba concentrarme. Por ello decidí ponerme a escribir un poco sobre lo que pasa o deja de pasar por mi cabeza. Hace una semana que sin quererlo ni beberlo, el corazón de “El Santo” dijo basta, y esta noticia entristece a todos. Pero no nos vamos a engañar, no va a parar la vida del resto, y menos aun cuando las noticias que van llegando son positivas. Pero yo, en mi inmensa empanada, mientras estoy pegado a libros sobre la persuasión y los mensajes subliminales, me he puesto la canción que he mencionado antes, simplemente para amenizar mi lectura. Pues bien, lo primero que se me ha venido a la cabeza es aquel chiquillo que debutó hace 21 años en San Mamés. Aquel chiquillo que ya es una leyenda, un padre, incluso, una persona adorada por todas y cada una de las esquinas del planeta. Y la siguiente imagen que me ha venido en mente ha sido aquel pie. Sí, el de Johannesburgo, seguramente cuando Arjen Robben se enteró de la noticia, le vino a la cabeza también. Bendito pie derecho… acto seguido, esfumándose esa imagen con una neblina blanca, me he imaginado como sería la historia del fútbol español sin un hombre como Casillas. Niños, no hagáis esto en casa.
Estaba estudiando y no lograba concentrarme. Por ello decidí ponerme a escribir un poco sobre lo que pasa o deja de pasar por mi cabeza. Hace una semana que sin quererlo ni beberlo, el corazón de “El Santo” dijo basta, y esta noticia entristece a todos. Pero no nos vamos a engañar, no va a parar la vida del resto, y menos aun cuando las noticias que van llegando son positivas. Pero yo, en mi inmensa empanada, mientras estoy pegado a libros sobre la persuasión y los mensajes subliminales, me he puesto la canción que he mencionado antes, simplemente para amenizar mi lectura. Pues bien, lo primero que se me ha venido a la cabeza es aquel chiquillo que debutó hace 21 años en San Mamés. Aquel chiquillo que ya es una leyenda, un padre, incluso, una persona adorada por todas y cada una de las esquinas del planeta. Y la siguiente imagen que me ha venido en mente ha sido aquel pie. Sí, el de Johannesburgo, seguramente cuando Arjen Robben se enteró de la noticia, le vino a la cabeza también. Bendito pie derecho… acto seguido, esfumándose esa imagen con una neblina blanca, me he imaginado como sería la historia del fútbol español sin un hombre como Casillas. Niños, no hagáis esto en casa.
Porque, de no existir Iker, qué sería de aquellos momentos en los que solamente él, nos pudo aclarar por el camino de la oscuridad. Un hombre, que echando la vista atrás, se puso por encima de su club, de los negocios, de la industria del fútbol… -¡Qué más dará! Llámenlo como quieran- y todo ello, solo para defender el fútbol de su país. Xavi peleándose con Ramos, Puyol detrás, Valdés ahí andaba también, o Arbeloa… innumerables son las “tanganas” que han tenido. Pero al final, Iker siempre estaba ahí, junto con los que considera amigos, para defender lo que el fútbol de nuestro país nos ha regalado durante años. Cómo iba entonces a desaparecer Iker.
Después de 6 días, interminables para él y sus allegados, ha salido de otra batalla, seguramente la que más respeto le ha impuesto en toda su carrera. Y ahora les voy a poner en el hipotético caso de que Iker Casillas no volviera a pisar un verde. Esto en realidad no es una locura, puede que ocurra de verdad. ¡Pero qué más dará! Casillas nos ha regalado a Iker. En sus últimos años en Portugal ha demostrado la compostura de un auténtico caballero, después de una marcha que no se puede catalogar con un adjetivo menor que “lamentable” del Real Madrid. Pensémoslo fríamente, Iker nos ha brindado su propia marca. La marca del yerno que toda madre querría tener, del amigo que nunca se separaría de ti y la que seguramente nos haya llegado más a todos: la imagen de nuestro “Kapitain”, de nuestro “Líder” que vivía entre la soledad de los tres palos. Iker, un “gracias” no sirve de nada. Solamente podemos sentarnos y disfrutar de lo que eres en toda tu esencia.
Después de 6 días, interminables para él y sus allegados, ha salido de otra batalla, seguramente la que más respeto le ha impuesto en toda su carrera. Y ahora les voy a poner en el hipotético caso de que Iker Casillas no volviera a pisar un verde. Esto en realidad no es una locura, puede que ocurra de verdad. ¡Pero qué más dará! Casillas nos ha regalado a Iker. En sus últimos años en Portugal ha demostrado la compostura de un auténtico caballero, después de una marcha que no se puede catalogar con un adjetivo menor que “lamentable” del Real Madrid. Pensémoslo fríamente, Iker nos ha brindado su propia marca. La marca del yerno que toda madre querría tener, del amigo que nunca se separaría de ti y la que seguramente nos haya llegado más a todos: la imagen de nuestro “Kapitain”, de nuestro “Líder” que vivía entre la soledad de los tres palos. Iker, un “gracias” no sirve de nada. Solamente podemos sentarnos y disfrutar de lo que eres en toda tu esencia.