Estrada Fernández: "He tenido la suerte, el privilegio, de dar con la profesión"
Xavier Estrada Fernández, además de un gran profesional, es un enorme apasionado de su trabajo y durante, aproximadamente, una hora así lo mostró ante la cámara
Pongamos sobre la mesa uno de los temas que más ha dado que hablar sobre el VAR que es esa transparencia, ese ir a ver la pantalla. ¿Nos podrías contar en qué casos se tiene que ir a la pantalla y en qué casos no?
Perfecto, sí. Hay cuatro casos establecidos a nivel de IFAB (International Football Association Board) sobre el protocolo del videoarbitraje, sobre cuando el árbitro tiene que ir a la pantalla. Ir a la pantalla es que el árbitro, dentro del terreno de juego, se dirige directamente entre los dos banquillos que es donde tienen la pantalla de televisión para hacer un on field review que es la revisión sobre el campo. Hay cuatro casos. Cuando hay una roja directa que el árbitro no ha estimado, por lo que sea, porque no lo ha visto, porque no lo ha interpretado como tal pero que se entiende como juego brusco o violento. Automáticamente, desde el VOR se comunica al árbitro que haga la revisión de campo y se le muestra la imagen para que pueda valorarla, siempre teniendo en cuenta que la última palabra, la última decisión siempre la tiene el árbitro sobre el terreno de juego. Otra de las situaciones en las que puede hacer un on field review es en los penaltis. Aquellas situaciones de penalti que el árbitro no lo ha visto o ha interpretado que no es penalti y, al revisar las imágenes, hay un claro y manifiesto error también tendría que dirigirse a hacer el on field review. También en jugadas de fuera de juego, fueras de juego sobretodo de interferencia, que son aquellas que, habiendo una posición del atacante en fuera de juego, interfiere atacando en la visión del portero, molestando al defensa, el árbitro, tiene que valorar también un poquito la situación en el terreno de juego. Tiene la oportunidad de ver si es realmente como él lo ha visto en el terreno de juego o no. El último de los casos son los goles. Cuando, por ejemplo, se marca un gol y antes del gol puede haber una falta que invalide el gol y que al árbitro no lo haya visto como tal. Ahí también se le invita a hacer un on field review para que decida sobre la situación.
Por lo tanto, no hablamos de poca transparencia sino de poco conocimiento del funcionamiento del VAR.
Los casos están muy preestablecidos. En todos los casos, reitero, que tiene que ser un error claro y manifiesto, claro y manifiesto (destaca), es muy importante que no conlleve a la interpretación. Podemos entrar que podría haber otras situaciones que, alomejor, el árbitro podría entrar. No es el caso hasta el momento porque el protocolo del VAR no lo permite. A lo que nos tenemos que ceñir es al lema de mínima interferencia y máximo beneficio.
Hablemos de fútbol ficción. ¿Hasta qué punto crees que puede llegar la modernización, la tecnología en el fútbol, en el arbitraje?
La verdad es que es una buena pregunta porque hace, prácticamente, un par de días estábamos en un partido de selecciones y con el observer, con el formador, que es un ex árbitro, comentàbamos, precisamente, la introducción de la tecnología, no solo en el fútbol sino en la sociedad en general. Y él hacía la reflexión de que si 20 años o 30 años atrás, que es cuando él estaba en activo, hubiera dicho a sus más allegados, a los árbitros del propio colectivo, que en 20 o 30 años tendríamos tecnología en los terrenos de juego, los compañeros, le hubieran tratado de loco. Y también es cierto que cuando entré en el colectivo ni se podía pensar en videoarbitraje ni se podía pensar en los banderines VIP, ni se podía pensar en los comunicadores. Pero si que es cierto que la tecnología avanza, que la vida va muy rápido y, probablemente, en los próximos años veamos cosas que ahora mismo ni nos podemos plantear.
No sé si has visto el video de Jared Gillett que es un árbitro que, actualmente, está arbitrando en la liga australiana, y que le ha querido fichar, de hecho, le ha fichado, la federación inglesa para, de momento, estar en Championship, no sé si te suena...
No
Todos los árbitros llevan un micrófono. Se está oyendo todo durante la retransmisión de televisión. ¿Qué te parece que se conozcan los movimientos, las palabras que se dicen durante un partido?
No es una cosa nueva. Es nueva en el fútbol, pero no en el mundo del deporte. Yo creo que es una suerte que, a nivel de rugby, por ejemplo, en Inglaterra los espectadores tengan la opción de comprar unos auriculares para ver el partido y al mismo tiempo oír las conversaciones entre los jugadores y el árbitro. Creo que no hay ningún problema en dar transparencia a lo que se comunica en el terreno de juego, es más, yo creo que lo haría atractivo. No he visto el vídeo, pero sería atractivo para el telespectador y, al final, lo que conllevaría es un trato de mucho respeto y, sobretodo, transparencia para el espectador. No sé si lo veremos en el fútbol o no pero sí que es cierto que, situaciones de videoarbitraje, han sido expuestas en los medios de comunicación. No solo las imágenes, también el audio. No en directo, pero sí a posteriori. En los terrenos de juego, hoy en día, cuando hay intervención del VAR, se ven en los videomarcadores del terreno de juego la jugada tal como se está televisando. Es difícil responder a esta pregunta porque, como te comentaba anteriormente, la tecnología avanza muchísimo. El fútbol, pero también el deporte, demanda mucho y ¿por qué no? alomejor el día de mañana se introduce también en el mundo del fútbol.
Hablemos de neutralidad. Antes, cuando hemos entrado al campo (en los terrenos de juego del FIF Lleida), un chaval te ha preguntado si en el último partido que arbitrase, el Catalunya-Venezuela, ibas con Catalunya. Supongo que no es el primer chaval, la primera persona que te pregunta de qué equipo eres.
Correcto. Entiendo que es normal, el fútbol es emoción. Cada uno siente una pasión por un equipo. En mi caso, llevo 23 años en el colectivo arbitral y si una cosa puedo mostrar o puedo estar orgulloso es de ser honesto, de ser sincero con aquello que hago y, sobretodo, de ser un profesional. Cuando tu diriges un partido de fútbol lo diriges con la garantía de ser lo más imparcial posible, independientemente de quien esté actuando, porque a ti, como árbitro, también te están evaluando y eso te permite intentar subir de categoría y estar en lo más alto. Y, como no podría ser de otra manera, piensa que siempre que realizamos un partido, detrás, durante toda la semana hay una prueba exhaustiva en todos los sentidos: físico, técnico, psicológico y táctico para la preparación del mismo y entiendo que quien no lo haga así no puede estar nunca al máximo nivel.
Y cuántas veces habremos escuchado, en el campo, los gritos de los aficionados tildando de los que sea al árbitro. ¿Hasta qué punto estáis aislados de lo que pasa fuera del terreno de juego?
En mi caso y en el de los compañeros que llevamos muchos años en el colectivo y por los terrenos de juego, sí que es cierto que hacemos una gestión muy distinta al árbitro novel e inexperto que empieza en categorías amateurs. Al final, forma parte del aprendizaje y cada uno es gestor y autodidacta de cómo gestionar los momentos, las situaciones y como saber llevarlo. Entiendo que no es fácil. Desgraciadamente, a veces, hay episodios que no son agradables. En el fútbol, y en la vida, no vale todo y no vale la ley del más fuerte, y menos la violencia de cualquier tipo. Hay que ser duros e inflexibles. Hay que dar un paso adelante radical contra ese tipo de conductas porque si no son reiteradas, se repiten y al final eso afecta a los más pequeños. Los niños y las niñas lo que quieren es disfrutar del deporte, aprender y pasarlo bien. La violencia sobra de todas.
Hablábamos de árbitros noveles y también hablamos de niños. ¿Cómo fue el Xavi Estrada adolescente que se decidió por el arbitraje?
Al Xavi Estrada adolescente le gustaba mucho el fútbol, aunque dediqué mis años al fútbol sala más que al fútbol. Tuve la oportunidad de tener dos buenos entrenadores como son Toni Seligrat y Ramón Planes, que ahora uno es entrenador y otro es director deportivo del Barcelona. La llegada del arbitraje me llega tarde comparado con los chavales y mujeres que entran dentro del colectivo, actualmente, con 14 años. Yo ingresé en el colectivo arbitral con 20 años en la temporada 96-97, básicamente, por un compañero que ya estaba dentro. La verdad es que nunca me había planteado el hecho de poder ser árbitro. Como jugador, tampoco me consideraba un jugador, queda mal que lo diga ahora, que protestara o que se llevara mal con los árbitros ni mucho menos pero bueno la verdad es que entonces me picaba la curiosidad de cómo sería el ser árbitro y hasta dia de hoy.
Siempre lo he considerado un trabajo duro. En el caso del fútbol-11, once contra once y, en muchas categorías un solo árbitro. ¿Cómo viviste los primeros años en ese aspecto?
Siempre me ha gustado ver la vida un poco distinta a los demás. Tu comentabas once contra once y yo pensaba en una oportunidad para crecer. “Estoy solo, pero voy a ver las situaciones a nivel individual y voy a ver cómo gestiono las situaciones que van apareciendo”. El principio, como todo es nuevo, vas cogiendo experiencia. En unos casos aprendes por ensayo-error o aprendes después de que caes, vuelves a caer y te levantas, y seguimos así. Pero la verdad es que para mí fue un camino, no diré fácil, fue un camino difícil, pero para mí cada categoría ha tenido lo suyo, seria por mi parte una manera muy deshonesta decir que todo me lo ha dado la primera división, ni mucho menos. Creo que donde he aprendido más es en el fútbol base, sobretodo en el territorial que es precisamente donde muchos de los partidos los tienes que gestionar tu solo: sin asistentes, ni cuarto árbitro, ni VAR, con la dificultad que eso entraña, y con las situaciones futbolísticas que se dan, a nivel técnico, que no se dan a nivel profesional.
Y acabas llegando a primera división. Eres un espectador, en primera fila, de una de las mejores ligas del mundo. ¿Qué relación tienes con los futbolistas?
Promociono en primera división en el año 2009. Durante el bagaje de haber arbitrado en otras categorías como la segunda ya hay jugadores con los que coincides, porque ellos mismos son fichados por otros equipos con lo cual ya no eres nuevo para ellos ni ellos para ti. Así que ya es una buena entrada con algunos de los equipos que te vas encontrando. El cambio más significativo entre primera y el resto es, a parte de la cobertura mediática que tiene la primera, sobretodo la rapidez del juego y el nivel técnico de los jugadores.
Hablemos a nivel técnico. ¿Qué jugador te ha sorprendido más siendo ese espectador de lujo sobre el campo?
Tengo el privilegio de estar en la mejor liga del mundo, con lo cual, desde Leo Messi, Cristiano Ronaldo, Santi Mina, Rodrigo, Diego Costa… cualquier jugador. Tengo la suerte de estar en la mejor liga, con los mejores jugadores y los más galardonados de la historia.
Muchas veces se comenta que cuando un hobbie se convierte en trabajo ese hobbie deja de apasionarte. ¿Es tu caso? ¿Sigues viendo fútbol?
No es mi caso, todo lo contrario. He tenido la suerte, el privilegio, de dar con la profesión. Me levanto cada día pensando en arbitraje y me voy a dormir siguiendo pensando en arbitraje y eso hace que realmente lo vivas con una pasión absoluta y una motivación muy profunda para hacer las cosas bien y para aprender y divertirte con los que estás haciendo.
¿Hasta qué punto es tu relación con el resto del colectivo arbitral español?
Tengo la suerte de pertenecer a un colectivo, como el nuestro, a nivel de primera división. Somos un grupo reducido, teniendo en cuenta que somos 20 árbitros y 40 asistentes. También es cierto que, al ser internacional y tener partidos internacional, hace que nuestra relación sea más próxima e íntima en el sentido que, no solo los partidos, también los viajes hacen que estemos en contacto prácticamente a diario. Además, con la implementación del videoarbitraje, cada 15 días nos vemos en la Ciudad del fútbol, en la RFEF, haciendo seminarios técnicos y físicos y evaluando todo el trabajo que venimos haciendo durante toda la temporada. Eso hace que haya muy buena sintonía en el colectivo y que cooperemos los unos con los otros. A parte porque, ahora, en nuestro trabajo cuando no estás de VAR de un compañero estas de otro o viceversa. Yo creo que es positivo y que hace que el colectivo sea muy eficiente
Y dentro de ese colectivo, sin desmerecer a nadie, ¿quién crees que es el mejor árbitro de nuestro país?
Tengo el gran privilegio, o la oportunidad, de vivir la mejor liga del mundo y la verdad es que tenemos los mejores árbitros del mundo. Y lo digo así con esta tranquilidad, aunque sé que formo parte de él, porque así lo pienso. Muchas veces parece que sea necesario que vengan desde fuera para decírtelo y creo que merece que seamos nosotros los que lo prediquemos porque creo que es así. Porque trabajamos duro para preparar cada uno de los partidos, porque cada uno de los árbitros, de los compañeros y amigos árbitros que tengo en el colectivo, me aportan cosas necesarias para ser mejor y yo creo que también puedo aportarles a ellos y sobretodo porque somos muy conscientes de que somos el espejo de los árbitros noveles, de los que empiezan, de los que van cogiendo experiencia y el dia de mañana pueden estar en nuestro lugar. Eso nos tiene que honrar de satisfacción. El hecho de luchar, de no dormirnos, de dar el 1000% para estar cada día en nuestra mejor versión. Tenemos la suerte de pertenecer a un colectivo como el que tenemos, de pertenecer a una federación como la que tenemos y de pertenecer a un comité de árbitro como tenemos. Un comité dirigido por Velasco Carballo, junto con todos sus dirigentes, que nos dan lo mejor y trabajan cada día para que tengamos lo mejor porque saben que el objetivo es que nosotros tengamos todas las herramientas a nuestro abasto tanto técnicas, como físicas, como tácticas, como psicológicas para llevar a cabo de la mejor manera posible nuestro trabajo en el terreno de juego.
Árbitro de primera e internacional. ¿Cómo recibiste la internacionalidad?
Te puedes imaginar que, si uno ya recibe, cuando le promueven de categoría, como un gran regalo, como un gran momento... Pues el hecho de ostentar la internacionalidad y la escarapela FIFA para un árbitro es un honor. Al final, somos unos pocos los elegidos y eso te abre una gran puerta. Que te den la confianza tanto FIFA como UEFA, tener la confianza de la manera como se está trabajando en nuestro comité para que puedas dirigir partidos de cualquier índole, fuera de España, yo creo que hay que valorar mucho esto, saber en cada momento dónde estamos y sobretodo tocar de pies en el suelo.
Estamos hablando constantemente de árbitros masculinos. Actualmente, vemos que hay un boom en el fútbol femenino, ¿también lo está habiendo en el arbitraje femenino?
En los últimos años se está trabajando muy bien a nivel de arbitraje femenino. Se están haciendo y promoviendo muchas campañas desde la RFEF, también desde cada una de la territoriales, como la Federació Catalana de Futbol con varias campañas contra la violencia, pero sobre todo promoviendo la figura de la mujer dentro del deporte también, y como no podía ser de otra forma, el arbitraje. Yo espero y deseo que, en un periodo muy cercano, tal como se promueve desde el colectivo, tengamos a una mujer arbitrando una final de Champions o de Copa del Rey y pongamos la figura de la mujer donde le pertoca, que es al mismo nivel que el hombre en todos los aspectos, como tendría que ser en la sociedad y en cualquier ámbito de la vida.
Y para acabar un mensaje para aquellos que se inicien en el mundo del arbitraje.
(Mira a cámara) Me dirijo directamente a ellos. Yo lo que os diría u os pediría es que disfrutéis en cada momento de aquello que hacéis: de aquel partido que dirigís o que os han dado la responsabilidad de dirigir, sin pensar en nada más que vivir apasionadamente el momento y sin poneros ningún tipo de presión, ni ningún objetivo a largo plazo. Disfrutad mucho de esto, intentad aprender lo máximo y pasadlo muy bien.
Muchas gracias Xavier Estrada Fernández por esta charla interesante y hago extensible este agradecimiento por parte de todos los compañeros de Revista Kapitain.
Gracias a vosotros.
Perfecto, sí. Hay cuatro casos establecidos a nivel de IFAB (International Football Association Board) sobre el protocolo del videoarbitraje, sobre cuando el árbitro tiene que ir a la pantalla. Ir a la pantalla es que el árbitro, dentro del terreno de juego, se dirige directamente entre los dos banquillos que es donde tienen la pantalla de televisión para hacer un on field review que es la revisión sobre el campo. Hay cuatro casos. Cuando hay una roja directa que el árbitro no ha estimado, por lo que sea, porque no lo ha visto, porque no lo ha interpretado como tal pero que se entiende como juego brusco o violento. Automáticamente, desde el VOR se comunica al árbitro que haga la revisión de campo y se le muestra la imagen para que pueda valorarla, siempre teniendo en cuenta que la última palabra, la última decisión siempre la tiene el árbitro sobre el terreno de juego. Otra de las situaciones en las que puede hacer un on field review es en los penaltis. Aquellas situaciones de penalti que el árbitro no lo ha visto o ha interpretado que no es penalti y, al revisar las imágenes, hay un claro y manifiesto error también tendría que dirigirse a hacer el on field review. También en jugadas de fuera de juego, fueras de juego sobretodo de interferencia, que son aquellas que, habiendo una posición del atacante en fuera de juego, interfiere atacando en la visión del portero, molestando al defensa, el árbitro, tiene que valorar también un poquito la situación en el terreno de juego. Tiene la oportunidad de ver si es realmente como él lo ha visto en el terreno de juego o no. El último de los casos son los goles. Cuando, por ejemplo, se marca un gol y antes del gol puede haber una falta que invalide el gol y que al árbitro no lo haya visto como tal. Ahí también se le invita a hacer un on field review para que decida sobre la situación.
Por lo tanto, no hablamos de poca transparencia sino de poco conocimiento del funcionamiento del VAR.
Los casos están muy preestablecidos. En todos los casos, reitero, que tiene que ser un error claro y manifiesto, claro y manifiesto (destaca), es muy importante que no conlleve a la interpretación. Podemos entrar que podría haber otras situaciones que, alomejor, el árbitro podría entrar. No es el caso hasta el momento porque el protocolo del VAR no lo permite. A lo que nos tenemos que ceñir es al lema de mínima interferencia y máximo beneficio.
Hablemos de fútbol ficción. ¿Hasta qué punto crees que puede llegar la modernización, la tecnología en el fútbol, en el arbitraje?
La verdad es que es una buena pregunta porque hace, prácticamente, un par de días estábamos en un partido de selecciones y con el observer, con el formador, que es un ex árbitro, comentàbamos, precisamente, la introducción de la tecnología, no solo en el fútbol sino en la sociedad en general. Y él hacía la reflexión de que si 20 años o 30 años atrás, que es cuando él estaba en activo, hubiera dicho a sus más allegados, a los árbitros del propio colectivo, que en 20 o 30 años tendríamos tecnología en los terrenos de juego, los compañeros, le hubieran tratado de loco. Y también es cierto que cuando entré en el colectivo ni se podía pensar en videoarbitraje ni se podía pensar en los banderines VIP, ni se podía pensar en los comunicadores. Pero si que es cierto que la tecnología avanza, que la vida va muy rápido y, probablemente, en los próximos años veamos cosas que ahora mismo ni nos podemos plantear.
No sé si has visto el video de Jared Gillett que es un árbitro que, actualmente, está arbitrando en la liga australiana, y que le ha querido fichar, de hecho, le ha fichado, la federación inglesa para, de momento, estar en Championship, no sé si te suena...
No
Todos los árbitros llevan un micrófono. Se está oyendo todo durante la retransmisión de televisión. ¿Qué te parece que se conozcan los movimientos, las palabras que se dicen durante un partido?
No es una cosa nueva. Es nueva en el fútbol, pero no en el mundo del deporte. Yo creo que es una suerte que, a nivel de rugby, por ejemplo, en Inglaterra los espectadores tengan la opción de comprar unos auriculares para ver el partido y al mismo tiempo oír las conversaciones entre los jugadores y el árbitro. Creo que no hay ningún problema en dar transparencia a lo que se comunica en el terreno de juego, es más, yo creo que lo haría atractivo. No he visto el vídeo, pero sería atractivo para el telespectador y, al final, lo que conllevaría es un trato de mucho respeto y, sobretodo, transparencia para el espectador. No sé si lo veremos en el fútbol o no pero sí que es cierto que, situaciones de videoarbitraje, han sido expuestas en los medios de comunicación. No solo las imágenes, también el audio. No en directo, pero sí a posteriori. En los terrenos de juego, hoy en día, cuando hay intervención del VAR, se ven en los videomarcadores del terreno de juego la jugada tal como se está televisando. Es difícil responder a esta pregunta porque, como te comentaba anteriormente, la tecnología avanza muchísimo. El fútbol, pero también el deporte, demanda mucho y ¿por qué no? alomejor el día de mañana se introduce también en el mundo del fútbol.
Hablemos de neutralidad. Antes, cuando hemos entrado al campo (en los terrenos de juego del FIF Lleida), un chaval te ha preguntado si en el último partido que arbitrase, el Catalunya-Venezuela, ibas con Catalunya. Supongo que no es el primer chaval, la primera persona que te pregunta de qué equipo eres.
Correcto. Entiendo que es normal, el fútbol es emoción. Cada uno siente una pasión por un equipo. En mi caso, llevo 23 años en el colectivo arbitral y si una cosa puedo mostrar o puedo estar orgulloso es de ser honesto, de ser sincero con aquello que hago y, sobretodo, de ser un profesional. Cuando tu diriges un partido de fútbol lo diriges con la garantía de ser lo más imparcial posible, independientemente de quien esté actuando, porque a ti, como árbitro, también te están evaluando y eso te permite intentar subir de categoría y estar en lo más alto. Y, como no podría ser de otra manera, piensa que siempre que realizamos un partido, detrás, durante toda la semana hay una prueba exhaustiva en todos los sentidos: físico, técnico, psicológico y táctico para la preparación del mismo y entiendo que quien no lo haga así no puede estar nunca al máximo nivel.
Y cuántas veces habremos escuchado, en el campo, los gritos de los aficionados tildando de los que sea al árbitro. ¿Hasta qué punto estáis aislados de lo que pasa fuera del terreno de juego?
En mi caso y en el de los compañeros que llevamos muchos años en el colectivo y por los terrenos de juego, sí que es cierto que hacemos una gestión muy distinta al árbitro novel e inexperto que empieza en categorías amateurs. Al final, forma parte del aprendizaje y cada uno es gestor y autodidacta de cómo gestionar los momentos, las situaciones y como saber llevarlo. Entiendo que no es fácil. Desgraciadamente, a veces, hay episodios que no son agradables. En el fútbol, y en la vida, no vale todo y no vale la ley del más fuerte, y menos la violencia de cualquier tipo. Hay que ser duros e inflexibles. Hay que dar un paso adelante radical contra ese tipo de conductas porque si no son reiteradas, se repiten y al final eso afecta a los más pequeños. Los niños y las niñas lo que quieren es disfrutar del deporte, aprender y pasarlo bien. La violencia sobra de todas.
Hablábamos de árbitros noveles y también hablamos de niños. ¿Cómo fue el Xavi Estrada adolescente que se decidió por el arbitraje?
Al Xavi Estrada adolescente le gustaba mucho el fútbol, aunque dediqué mis años al fútbol sala más que al fútbol. Tuve la oportunidad de tener dos buenos entrenadores como son Toni Seligrat y Ramón Planes, que ahora uno es entrenador y otro es director deportivo del Barcelona. La llegada del arbitraje me llega tarde comparado con los chavales y mujeres que entran dentro del colectivo, actualmente, con 14 años. Yo ingresé en el colectivo arbitral con 20 años en la temporada 96-97, básicamente, por un compañero que ya estaba dentro. La verdad es que nunca me había planteado el hecho de poder ser árbitro. Como jugador, tampoco me consideraba un jugador, queda mal que lo diga ahora, que protestara o que se llevara mal con los árbitros ni mucho menos pero bueno la verdad es que entonces me picaba la curiosidad de cómo sería el ser árbitro y hasta dia de hoy.
Siempre lo he considerado un trabajo duro. En el caso del fútbol-11, once contra once y, en muchas categorías un solo árbitro. ¿Cómo viviste los primeros años en ese aspecto?
Siempre me ha gustado ver la vida un poco distinta a los demás. Tu comentabas once contra once y yo pensaba en una oportunidad para crecer. “Estoy solo, pero voy a ver las situaciones a nivel individual y voy a ver cómo gestiono las situaciones que van apareciendo”. El principio, como todo es nuevo, vas cogiendo experiencia. En unos casos aprendes por ensayo-error o aprendes después de que caes, vuelves a caer y te levantas, y seguimos así. Pero la verdad es que para mí fue un camino, no diré fácil, fue un camino difícil, pero para mí cada categoría ha tenido lo suyo, seria por mi parte una manera muy deshonesta decir que todo me lo ha dado la primera división, ni mucho menos. Creo que donde he aprendido más es en el fútbol base, sobretodo en el territorial que es precisamente donde muchos de los partidos los tienes que gestionar tu solo: sin asistentes, ni cuarto árbitro, ni VAR, con la dificultad que eso entraña, y con las situaciones futbolísticas que se dan, a nivel técnico, que no se dan a nivel profesional.
Y acabas llegando a primera división. Eres un espectador, en primera fila, de una de las mejores ligas del mundo. ¿Qué relación tienes con los futbolistas?
Promociono en primera división en el año 2009. Durante el bagaje de haber arbitrado en otras categorías como la segunda ya hay jugadores con los que coincides, porque ellos mismos son fichados por otros equipos con lo cual ya no eres nuevo para ellos ni ellos para ti. Así que ya es una buena entrada con algunos de los equipos que te vas encontrando. El cambio más significativo entre primera y el resto es, a parte de la cobertura mediática que tiene la primera, sobretodo la rapidez del juego y el nivel técnico de los jugadores.
Hablemos a nivel técnico. ¿Qué jugador te ha sorprendido más siendo ese espectador de lujo sobre el campo?
Tengo el privilegio de estar en la mejor liga del mundo, con lo cual, desde Leo Messi, Cristiano Ronaldo, Santi Mina, Rodrigo, Diego Costa… cualquier jugador. Tengo la suerte de estar en la mejor liga, con los mejores jugadores y los más galardonados de la historia.
Muchas veces se comenta que cuando un hobbie se convierte en trabajo ese hobbie deja de apasionarte. ¿Es tu caso? ¿Sigues viendo fútbol?
No es mi caso, todo lo contrario. He tenido la suerte, el privilegio, de dar con la profesión. Me levanto cada día pensando en arbitraje y me voy a dormir siguiendo pensando en arbitraje y eso hace que realmente lo vivas con una pasión absoluta y una motivación muy profunda para hacer las cosas bien y para aprender y divertirte con los que estás haciendo.
¿Hasta qué punto es tu relación con el resto del colectivo arbitral español?
Tengo la suerte de pertenecer a un colectivo, como el nuestro, a nivel de primera división. Somos un grupo reducido, teniendo en cuenta que somos 20 árbitros y 40 asistentes. También es cierto que, al ser internacional y tener partidos internacional, hace que nuestra relación sea más próxima e íntima en el sentido que, no solo los partidos, también los viajes hacen que estemos en contacto prácticamente a diario. Además, con la implementación del videoarbitraje, cada 15 días nos vemos en la Ciudad del fútbol, en la RFEF, haciendo seminarios técnicos y físicos y evaluando todo el trabajo que venimos haciendo durante toda la temporada. Eso hace que haya muy buena sintonía en el colectivo y que cooperemos los unos con los otros. A parte porque, ahora, en nuestro trabajo cuando no estás de VAR de un compañero estas de otro o viceversa. Yo creo que es positivo y que hace que el colectivo sea muy eficiente
Y dentro de ese colectivo, sin desmerecer a nadie, ¿quién crees que es el mejor árbitro de nuestro país?
Tengo el gran privilegio, o la oportunidad, de vivir la mejor liga del mundo y la verdad es que tenemos los mejores árbitros del mundo. Y lo digo así con esta tranquilidad, aunque sé que formo parte de él, porque así lo pienso. Muchas veces parece que sea necesario que vengan desde fuera para decírtelo y creo que merece que seamos nosotros los que lo prediquemos porque creo que es así. Porque trabajamos duro para preparar cada uno de los partidos, porque cada uno de los árbitros, de los compañeros y amigos árbitros que tengo en el colectivo, me aportan cosas necesarias para ser mejor y yo creo que también puedo aportarles a ellos y sobretodo porque somos muy conscientes de que somos el espejo de los árbitros noveles, de los que empiezan, de los que van cogiendo experiencia y el dia de mañana pueden estar en nuestro lugar. Eso nos tiene que honrar de satisfacción. El hecho de luchar, de no dormirnos, de dar el 1000% para estar cada día en nuestra mejor versión. Tenemos la suerte de pertenecer a un colectivo como el que tenemos, de pertenecer a una federación como la que tenemos y de pertenecer a un comité de árbitro como tenemos. Un comité dirigido por Velasco Carballo, junto con todos sus dirigentes, que nos dan lo mejor y trabajan cada día para que tengamos lo mejor porque saben que el objetivo es que nosotros tengamos todas las herramientas a nuestro abasto tanto técnicas, como físicas, como tácticas, como psicológicas para llevar a cabo de la mejor manera posible nuestro trabajo en el terreno de juego.
Árbitro de primera e internacional. ¿Cómo recibiste la internacionalidad?
Te puedes imaginar que, si uno ya recibe, cuando le promueven de categoría, como un gran regalo, como un gran momento... Pues el hecho de ostentar la internacionalidad y la escarapela FIFA para un árbitro es un honor. Al final, somos unos pocos los elegidos y eso te abre una gran puerta. Que te den la confianza tanto FIFA como UEFA, tener la confianza de la manera como se está trabajando en nuestro comité para que puedas dirigir partidos de cualquier índole, fuera de España, yo creo que hay que valorar mucho esto, saber en cada momento dónde estamos y sobretodo tocar de pies en el suelo.
Estamos hablando constantemente de árbitros masculinos. Actualmente, vemos que hay un boom en el fútbol femenino, ¿también lo está habiendo en el arbitraje femenino?
En los últimos años se está trabajando muy bien a nivel de arbitraje femenino. Se están haciendo y promoviendo muchas campañas desde la RFEF, también desde cada una de la territoriales, como la Federació Catalana de Futbol con varias campañas contra la violencia, pero sobre todo promoviendo la figura de la mujer dentro del deporte también, y como no podía ser de otra forma, el arbitraje. Yo espero y deseo que, en un periodo muy cercano, tal como se promueve desde el colectivo, tengamos a una mujer arbitrando una final de Champions o de Copa del Rey y pongamos la figura de la mujer donde le pertoca, que es al mismo nivel que el hombre en todos los aspectos, como tendría que ser en la sociedad y en cualquier ámbito de la vida.
Y para acabar un mensaje para aquellos que se inicien en el mundo del arbitraje.
(Mira a cámara) Me dirijo directamente a ellos. Yo lo que os diría u os pediría es que disfrutéis en cada momento de aquello que hacéis: de aquel partido que dirigís o que os han dado la responsabilidad de dirigir, sin pensar en nada más que vivir apasionadamente el momento y sin poneros ningún tipo de presión, ni ningún objetivo a largo plazo. Disfrutad mucho de esto, intentad aprender lo máximo y pasadlo muy bien.
Muchas gracias Xavier Estrada Fernández por esta charla interesante y hago extensible este agradecimiento por parte de todos los compañeros de Revista Kapitain.
Gracias a vosotros.